Grandeza ante los poderosos

El Ministerio de Asuntos Exteriores chino expresó hoy su firme oposición a la actual visita a Australia del Dalai Lama, líder religioso y espiritual tibetano, y pidió al Gobierno de ese país que no le permita involucrarse en actividades separatistas. ”El Gobierno chino se opone a que cualquier país apoye o dé comodidades a las actividades separatistas del Dalai Lama”, señaló. También pidió a Australia que tome en consideración la grave preocupación de China por el viaje del líder tibetano, exiliado desde 1959. El Dalai Lama llegó este miércoles a Australia, segunda escala de la gira por varios países que inició en el Reino Unido.
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Las relaciones entre China y el Dalai Lama se han tensado en los últimos meses a raíz de los violentos incidentes de marzo en Lhasa y otras ciudades tibetanas, unos hechos que según Pekín fueron instigados por grupos y organizaciones próximas al líder tibetano.

Pese a las acusaciones de Pekín, delegados comunistas y del Dalai llevaron a cabo negociaciones en abril de cara a reducir las tensiones entre ambas partes, un diálogo que finalizó con escasos resultados.

Sin embargo, el Dalai Lama pide calma cuando la antorcha olímpica pase por Tíbet. El Dalai Lama respondió pidiendo a los tibetanos que se abstengan de dificultar el paso de la antorcha de los Juegos Olímpicos de 2008 por la capital tibetana, Lhasa, y subrayó su total apoyo a China, el país organizador.

La llama olímpica pasará por Tíbet la próxima semana. Los detalles son secretos desde la represión llevada a cabo por las fuerzas de seguridad chinas de unas manifestaciones, en marzo, en Lhasa, contra la autoridad china en esta región himalaya, parte integrante del país para el régimen de Pekín.

El líder espiritual de los tibetanos en el exilio, de 72 años de edad, reiteró sus llamamiento a una mayor autonomía política para Tíbet pero recalcó que no quiere que el paso de la antorcha por Lhasa genere protestas semejantes a las de sus etapas en Londres y París en su periplo mundial de meses pasados.

"Apoyamos totalmente los Juegos Olímpicos; la antorcha olímpica es parte de ellos", dijo el Dalai Lama a la prensa en Sidney, donde imparte unos seminarios de meditación.
"Más de 1.000 millones de hermanos y hermanas chinos se sienten muy orgullosos; debemos respetar eso" agregó.

Voces críticas con la autoridad que Pekín impone en Tíbet denunciaron que el paso de la antorcha olímpica por la región himalaya es un insulto, considerando sobre todo los disturbios de marzo. El gobierno tibetano en el exilio señaló que en esos hecho murieron 203 personas, mientras que China sostiene que la acción de sus fuerzas de seguridad no causó muertos y que los "manifestantes" fueron los culpables de 21 muertes. China culpó al Dalai Lama de haber fomentado los disturbios y lo acusó de intentar sabotear los Juegos Olímpicos, que comenzarán en Pekín el 8 de agosto.

Pese a estas acusaciones, las autoridades de Pekín reanudaron a principios de mayo el diálogo con los representantes del líder tibetano. El sismo que sacudió la región de Sichuan, en el suroeste de China, el 12 de mayo, causó su nueva suspensión. Precisamente en referencia al sismo, el Dalai Lama se desmarcó en Sidney de la desafortunada declaración de la actriz estadounidense Sharon Stone, que en el festival de cine de Cannes (sur de Francia) dijo que ese terremoto en el que murieron más de 69.000 personas fue "mal karma" por la política de Pekín en Tíbet. "Sí, conozco a esa señora", confirmó el Dalai Lama al precisar que todas las tragedias "son kármicas... Pero su tipo de comentario..., no se", dijo.

Respecto a las negociaciones reanudadas, el líder tibetano -que tuvo que abandonar Tíbet en 1959 tras una fracasada sublevación contra la autoridad china- se mostró optimista. En años pasados, el Dalai Lama ya renunció a la independencia de Tíbet y lo reconoció como parte de China. Sin embargo, nunca dejó de abogar por una mayor autonomía política y religiosa de su región natal. Por eso en Australia subrayó que dar dinero a Tíbet no resolverá el problema de China en ese territorio. "Den a Tíbet una autonomía significativa", pidió al señalar que sin cambios, las quejas que dan lugar a disturbios periódicos se transmitirán de generación en generación.

ver también en este Blog: La lucha de los monjes budistas por la independencia del Tibet y Se encendió la llama olímpica