29 de febrero de 2008

2008: año bisiesto

Un año es bisiesto si dura 366 días, en vez de los 365 de un año común. Ese día adicional se suele añadir al final del mes más corto, fechándose como 29 de febrero. Este día se añade para corregir el desfase que existe con la duración real de los años: 365 días y 6 horas aproximadamente. Esto hace que se corrija cada cuatro años (los años múltiplos de 4) ya que se acumulan 24 horas.

Primitivamente el calendario romano constaba de 10 meses; se atribuye a la influencia de los sabinos la introducción del calendario de 12 meses con tres fechas mensuales fijas: Calendas, Nonas e Idus.

Julio César estableció el calendario de 365 días con años bisiestos y Gregorio XIII lo reformó tal y como es hoy.

Las Calendas eran el primer día de cada mes. Los días anteriores al día 1 hacían referencia a las Calendas de ese mes. Por ejemplo, en un año normal de 365 días: el 1 de marzo, era las Calendas de Marzo; el 28 de febrero era el día anterior a las Calendas de Marzo; el 27 de febrero era el 2º día antes de Calendas de Marzo (se contaba el día de partida y el de llegada en la cuenta); el 26 de febrero era el 3º día antes de las Calendas de Marzo; el 25 de febrero era el 4º día antes de las Calendas de Marzo; el 24 de febrero era el 5º día antes de las Calendas de Marzo; el 23 de febrero era el 6º día antes de las Calendas de Marzo. En los años bisiestos se agregaba un día después del 23, que era el bis-sexto antes de las Calendas de Marzo (Dies bis sextus ante Kalendas Martias). Como nosotros ya no contamos las Calendas, nos resulta más cómodo considerar que el día agregado es en realidad el último del mes.
El calendario juliano consideraba bisiesto los años divisibles entre cuatro. Así el año juliano dura 365 días +1/4=365,25 días (más que el año trópico que dura 365,2422 días).

La regla para los años bisiestos según el calendario gregoriano es:
Un año es bisiesto si es divisible por 4, excepto el último de cada siglo (aquellos divisibles por 100), que para ser bisiestos, también deben ser divisibles por 400.
Es decir los años que sean divisibles por 4 serán bisiestos; aunque no serán bisiestos si son divisibles entre 100 (como los años 1700, 1800, 1900 y 2100) a no ser que sean divisibles por 400 (como los años 1600, 2000 ó 2400). En 400 años debe haber 97 años bisiestos, de esa manera el año del calendario gregoriano se mantiene muy parecido al año solar. Así el año gregoriano dura 365 días +1/4 -1/100 +1/400 = 365,2425 días (más que el año trópico que dura 365,2422 días).

Como el error es de 0,0003 días por año, podría parecer que al cabo de tres mil años se habrá acumulado un día de error. Pero en realidad no sabemos exactamente cuándo llegará el error a un día. La cifra de 365,2422 días por año trópico no es del todo exacta, porque tanto la duración del año trópico, como la velocidad de rotación de la tierra, van cambiando con los siglos, y de una manera que no es completamente predecible.